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Asociación de Escritores de Calama presenta «Calama y sus paisajes en letras», un compilado de relatos y poemas con imágenes que buscan inspirar a nuevas generaciones
Bajo la tenue luz del Centro Cultural de Calama, nueve escritores subieron al escenario uno a uno. No llevaban libros en las manos, sino proyector y micrófono. Sus palabras, tejidas por años de oficio, se mezclaban con imágenes de la quebrada de Chiu Chiu, el río Loa y rostros anónimos de la ciudad. Así nació «Calama y sus paisajes en letras», un proyecto financiado por el municipio que pronto llegará a colegios y juntas de vecinos de la comuna de Calama.
Mario Araya Fritis, presidente de la Asociación de Escritores de Calama (fundada en 2000), no esconde su emoción: «Ser parte del fomento de la cultura y de las artes en Calama. Es importante darnos a conocer, que los jóvenes participen con nosotros y que se abran a la literatura. Incentivar a que escriban y desarrollen sus talentos, es por eso que queremos que este material no quede acá, sino que también pueda ir hacia fuera, a los colegios o a donde nos inviten».
El trabajo, que incluye videos con poemas visuales, captura desde tradiciones atacameñas hasta relatos mineros. Miria Veliz, autora de diez libros, lo explica mejor: «En mis libros dejo un legado de que existieron pueblos, comunidades y su historia, siendo lo más importante. La idea de que este proyecto se difunda en los establecimientos educacionales, y qué mejor que empezar en Calama, nuestra tierra».
Para Norma Meza, poeta y dramaturga local, recuerda los meses de grabaciones bajo el sol del desierto: «Felices, porque concretamos este gran proyecto, en donde estuvimos harto tiempo trabajándolo, entre grabaciones, levantarse muy temprano, la puesta en escena y todo lo que conlleva una producción audiovisual».
Doris Quintero, fundadora de la asociación, añade un dato crucial: «Pretendemos seguir en el tiempo, o sea que se acerquen más jóvenes, más personas amantes de la literatura. Reflejamos el patrimonio local de Calama, Chuquicamata… también hay libros de poemas, infantiles, sobre sucesos paranormales. Cada uno de los escritos tiene historia y sacrificio, ya que somos autodidactas puesto que tenemos muy poco apoyo a nivel local».
