La obstetricia o matronería es el área de la salud dedicada al cuidado de la mujer durante el embarazo, el parto y el puerperio, además de la salud sexual y reproductiva en el transcurso de su vida. Profesionales que mantuvieron prestaciones incluso en pandemia. Ver video aquí
En Calama, son muchas las profesionales que han dedicado su carrera al cuidado de las mujeres loínas, una importante tarea que debió realizarse incluso en plena pandemia. La historia de una de las matronas que debió liderar este proceso, la conoceremos gracias al proyecto “Lideresas Protagonistas del cambio para la Provincia El Loa”, donde periodistas locales levantarán 6 historias de mujeres de nuestra zona. Reportajes que son posibles gracias al financiamiento del Fondo de Fomento de Medios de Comunicación Social del Gobierno de Chile y del Consejo Regional de Antofagasta.
Se trata de Yohanna Auad, quien es oriunda de la ciudad de Los Ángeles. Sobre su vocación, comenta que su interés por esta profesión despierta durante su primer embarazo, donde se encantó con el acompañamiento, la educación y los cuidados que entregaban a las madres gestantes, así que, una vez terminado su período de postnatal, se preparó e ingresó a la Universidad de la Frontera a estudiar obstetricia y puericultura.
Llegó a Calama hace 25 años, recién egresada, y desde el ejercicio de su carrera ha podido observar y acompañar la evolución que ha tenido la mujer de la provincia, “La paciente de esos años era completamente distinta, una paciente mucho más callada, que no cuestionaba las indicaciones, era más receptiva, muy apegada a la familia, necesitada de apoyo, sobre todo en los momentos en que estaban próximas a ser mamás o a ser operadas. Bastante más bajo perfil de lo que es la mujer hoy en día, que está sumamente empoderada, más informada, preguntan mucho”.
Sobre la influencia de la obstetricia en la salud, manifiesta que su profesión es muy importante, ya que son responsables de atender y acompañar a las mujeres en un período sensible y trascendente de sus vidas. “En el caso del sistema público, los partos normales los atendemos sin asistencia de médicos. Es decir, cuando las estadísticas dicen que el hospital tuvo mil partos normales, esos partos fueron atendidos por matronas”.
La salud de la mujer en pandemia también fue prioridad
Sin duda, uno de los momentos de mayor complejidad durante sus años de carrera, lo vivió cuando debió liderar a su equipo durante la pandemia, donde el aporte de todos y todas en su área fue fundamental, pues según señala, todos buscaron la forma de mantener la atención en salud hacia las mujeres loínas. “Cuando partió la pandemia, la verdad es que no se sabía nada, no había mucho conocimiento de cómo el COVID podía afectar a una embarazada, sabíamos cómo afecta a un adulto, había información de cómo afectaba a los pacientes pediátricos, pero embarazadas en los primeros seis, ocho meses, no había información. Sin embargo, mantuvimos todas nuestras prestaciones, todas las relacionadas con las embarazadas”, enfatizó con orgullo la gestora en el área de obstetricia.
De igual forma, para atender correctamente la urgencia provocada por la crisis de salud ocasionada por el COVID, debieron otorgar espacios para estos fines. “En lo particular, nosotros dentro del hospital de Calama, fuimos una de las unidades más grandes, que tuvo que ceder espacios para la atención de los pacientes infectados con COVID, se necesitaban más camas ya que en ese momento éramos el único recinto de la provincia que atendía a los pacientes afectados por el virus”.
Al ser consultada respecto a los desafíos que enfrenta su profesión, tanto en la región como en el país, manifiesta que “las colegas estamos invitadas a fortalecer y proteger la matronería, ya que la pandemia provocó que nos volvamos más individualistas y ya no estamos tan concentradas en el bien común, sino que en el bien individual. Ese es el desafío y el llamado que debemos atender, defender la obstetricia, que es una profesión que ha permitido importantes logros para salud pública de nuestro país”.